La organización de las
TIC en la escuela y en la comunidad
Contar con una adecuada infraestructura
digital será un deber y no una novedad en las salas de clases de las escuelas
iberoamericanas. No existirá duda del rol que el sistema educativo público
deberá cumplir en la inclusión digital y no será posible encontrar excusas para
no avanzar gradual, pero decididamente en esta dirección. La diferencia
radicará entonces en las aplicaciones, los usos e impactos que este nuevo
recurso establecerá en la vida cotidiana de los principales actores del sistema
educativo. En otras palabras, se distinguirá el buen uso de la tecnología
cuando esta, de modo transparente y permanente, permita nuevas oportunidades de
aprendizaje, simplifique las tareas administrativas del centro escolar o
favorezca la participación de la comunidad educativa. Cuando eso ocurra, la
tasa de alumnos por computador o el ancho de banda disponible no tendrán mayor
relevancia.
Primera perspectiva
La primera perspectiva asume que las
nuevas herramientas que dominan el mundo productivo del nuevo siglo requieren
desarrollar un conjunto de habilidades y destrezas en el uso y la gestión de
estos nuevos medios. El sistema educativo debe hacerse cargo de estas
habilidades y destrezas, y bajo este enfoque muchos currículos han establecido
nuevos ámbitos de destrezas que generan a su vez estándares e indicadores que
deben ser incorporados en los planes y programas de estudios.
Esta perspectiva ha fundamentado la
instalación de nuevos espacios educativos tanto en la planificación curricular
como en la infraestructura escolar: el laboratorio o sala de computación. Este
nuevo espacio de aprendizaje, normalmente a cargo de un coordinador o
responsable, acoge a los alumnos para que aprendan a utilizar estas
herramientas y desarrollen las competencias necesarias para un uso creativo y
eficiente de estos recursos en sus trabajos escolares. Dependiendo de los
criterios educativos del proyecto institucional del centro escolar, las salas
de computación suelen gobernarse con reglamentos que tienden a enfocar el uso
curricular de las herramientas digitales disponibles.
La segunda perspectiva se enfoca en el
posible cambio de las estructuras de aprendizaje que se puede observar en las
nuevas generaciones que tempranamente se ven expuestas al uso de tecnologías
digitales y generan nuevas formas de adquirir habilidades, manejar información
y construir nuevos aprendizajes. Esto tiene consecuencias estructurales para el
sistema escolar. Desde esta perspectiva, en las aulas se mantendrían
estructuras obsoletas para la obtención de aprendizajes en estudiantes que
cuentan con nuevas habilidades no consideradas en la didáctica tradicional.
Esta brecha genera pérdidas de oportunidad y explicaría parte de la crisis de
motivación y valoración que las nuevas generaciones tienen por la institución
educativa (Prenski, 2001a).
Quizá el primer elemento descriptor de
esta perspectiva surge de la mano de Marc Prensky al proponer en el año 2001 el
concepto de “nativos digitales” para describir la facilidad innata que tienen
las nuevas generaciones para manejar y alcanzar niveles superiores de destrezas
en el manejo de los dispositivos digitales. Señala en su publicación respecto a
las nuevas generaciones: “ellos piensan y procesan información de manera
fundamentalmente distinta a sus antecesores. Su lengua nativa es el idioma
digital de los computadores, los videojuegos e Internet”. Como consecuencia,
“nuestros educadores inmigrantes digitales, que hablan un lenguaje obsoleto (de
la era predigital), están luchando por enseñar a una población que habla un
lenguaje completamente nuevo” (Prenski, 2001a).
Desafíos fundamentales
que deben ser enfrentados:
-El primero de estos
desafíos es el diseño, mantenimiento y gestión de la infraestructura
tecnológica.
-El segundo desafío
está centrado en las competencias docentes que se requieren para la integración
curricular de las tecnologías en el centro educativo.
-El tercer desafío
radica en la provisión de recursos y contenidos digitales que favorezcan el uso
e integración pedagógica de las capacidades instaladas en el establecimiento.
LA MIGRACIÓN DIGITAL,
UN PROCESO DE LARGA DATA CUANDO ESTAMOS
ENTRANDO EN LA SEGUNDA DÉCADA DIGITAL.
Porque la migración digital tiene como
protagonistas a dos tipos totalmente diferentes de sujetos. Cuando se trata de
industrias y formatos, quienes están a cargo no son los productores ni los consumidores
actuales, ni mucho menos los que predominarán dentro de dos décadas. Se trata
de personas de entre 35 y 55 años que no son nativos digitales: ellos
(nosotros) son (somos) los inmigrantes digitales.
Aquí la diferencia mayor no es tanto en términos
de cambios físicos del cerebro (aunque a lo mejor también los hay), sino en
claros usos diferenciados de funcionalidades cerebrales respondiendo a entornos
ubicuos densos en información, que deben ser procesados en paralelo, y en la
capacidad de toma de decisiones simultáneas, que tienen su modelo en la
simulación de los videojuegos, por ejemplo. Ha habido muchos nombres que han
tratado de encapsular lo distintivo de esta generación de estudiantes. Se los
ha denominado generación N (iNternet) o D (digital), más recientemente
generación Einstein, pero para nuestro gusto el epíteto que mejor da cuenta de
ellos es el de “nativos digitales”.
Educar en comunidad:
promesas y realidades de la Web 2.0 para la innovación pedagógica
En el actual contexto iberoamericano,
marcado todavía por las desigualdades y carencias en cuanto a calidad y equidad
educativas, la brecha digital, la más que insuficiente alfabetización
tecnológica y el escaso nivel de penetración de las TIC, puede parecer una
frivolidad de diletantes comenzar este capítulo hablando de una futura e
imprecisa Web de Nueva Generación. Pero el ritmo del cambio tecnológico y
generacional confiere una nada desdeñable relevancia a este tipo de
planteamientos ya que, aun persistiendo las brechas y desigualdades, los
poderes públicos y la institución docente deberán afrontar esta transición en
muy pocos años y quemando etapas, por lo que será preciso identificar y
planificar cuanto antes posibles escenarios y plantear políticas innovadoras y
eficientes.
CONECTIVISMO Y WEB 2.0:
ACERCA DE LOS NUEVOS ESPACIOS DE
CONVERGENCIA DE LA INNOVACIÓN PEDAGÓGICA
Y EL DESARROLLO DE LAS INFOTECNOLOGÍAS
Una gran mayoría de los estudios e
indagaciones sobre la vigencia y evolución de los paradigmas educativos, y
particularmente sobre el binomio educación-tecnología, en las últimas décadas
(Lara, 2006; Benito, 2009, y Roberto Carneiro3 en este mismo volumen) coincide
en resaltar la vigencia del constructivismo como paradigma pedagógico de nuestro
tiempo. Como se sabe, esta teoría se asentó de manera muy clara durante la
última década del pasado siglo, pero proviene de aportaciones y corrientes
diversas y anteriores (Lara, 2006). El principio de “aprender a aprender” se
plantea como columna vertebral de este modelo, que defiende que el conocimiento
es una construcción del ser humano, que se realiza a partir de bases cognitivas
que ya posee: el profesor es un guía, un mediador, que facilita los
instrumentos para que el alumno genere su propio aprendizaje. El constructivismo
converge y se asocia desde un principio a Internet, universo con el que
comparte el nexo importante: ambos representan la innovación. (Benito, 2009). Y
a partir de esta confluencia comienza a perfilarse en los primeros años del
nuevo milenio una idea sustancial para el avance de los procesos educativos: el
aprendizaje es individual, pero está mediado socialmente, se verifica en grupos
naturales de pertenencia de las personas, de forma que no es posible entender
por separado las dos dimensiones, individual y social.
POSIBILIDADES Y RETOS
DE LA WEB 2.0 EDUCATIVA
¿Web de datos o web de
los ciudadanos?
La Web 2.0, afirma un tanto retóricamente
Davis (2005), “no es una tecnología, sino una actitud”. O, dicho de otra
manera, el desarrollo de esta nueva plataforma web se apoyará no tanto en el
componente tecnológico como en la aparición de nuevos patrones de uso social
(Fumero, 2007). Al margen de percepciones más o menos arriscadas, si nos
atenemos a sus estructuras, sistemas y al uso mayoritario de herramientas,
aplicaciones y sitios, no parece incompatible, sino altamente complementaria,
la consideración de la Web 2.0 como web de las personas (en la medida en que
está protagonizada y alimentada ya en muy gran medida por acciones e
interacciones de los usuarios) con su caracterización como web de datos, puesto
que lo definitorio de este nuevo estadio de Internet son precisamente las
utilidades y servicios que se sustentan en una base de datos “que puede ser
modificada por los usuarios, ya sea en sus contenidos (añadiendo, cambiando o
borrando la información, o asociando metadatos a la información existente),
bien en la forma de presentarlos o en la forma y el contenido simultáneamente”
(Ribes, 2007).
Los sistemas de
creación colectiva: blogs en la centralidad la pedagogía constructivista.
Después de estos años de tanteo parece que
nos encontramos ya en el momento adecuado para la integración y generalización
de los blogs en los procesos educativos. Un buen número de autores (Lara, 2005;
O’ Donell, 2005) coinciden en que los blogs, por sus características, son un
instrumento de altísimo valor dentro de la pedagogía constructivista, en la
línea del conectivismo que hemos analizado más arriba. Los blogs establecen un
canal de comunicación, formal o informal, entre profesor y alumnos, promueven
la interacción social, dotan al alumno de un medio personal para la
experimentación de su propio aprendizaje y su utilización requiere solo unos
mínimos conocimientos de tecnología.
Las redes sociales en
la educación: la fuerza de los “vínculos débiles” y el aprendizaje en comunidad.
La irrupción de la Web 2.0 ha inducido,
sin embargo, una inflexión sustancial de la concepción de las redes y comunidades. El desarrollo del
llamado software social (SoSo), que soporta aplicaciones cada vez más potentes
y sofisticadas, pero muy fáciles de usar para la comunicación y las relaciones
interpersonales, grupales y sociales, y la consiguiente aparición de sitios
(Social Network Sites, SNS) dedicados monográficamente a promover redes
sociales y con capacidad para movilizar grandes multitudes en intercambios e
interdependencias virtuales de todo tipo (financieras, de amistad o aficiones,
profesionales, sexuales, antisociales…), hacen que las actuales redes sociales
estén revolucionando la forma en que nos comunicamos y compartimos información
con otros en la sociedad de hoy. Santamaría (2008) identifica algunos de los
elementos más distintivos de estas nuevas estructuras virtuales: a) capacidad
de crear perfiles visibles; b) la exhibición pública de miembros o amigos; c) la integración de
otras herramientas web en el SNS (blogs, foros, podcasting, mensajería
instantánea…), y d) de manera particularmente pertinente por lo que al plano
educativo se refiere, la posibilidad de crear comunidades de interés o de
práctica.
Plataformas educativas
y redes docentes
INTERNET, RECURSO
EDUCATIVO
Las tecnologías de la
información y la comunicación permiten la construcción de redes de comunicación
e interacción con personas de otros lugares y tienen un potencial reconocido
para apoyar el aprendizaje, la construcción social del conocimiento y el
desarrollo de habilidades y competencias para aprender autónomamente. Estas
redes informáticas ofrecen una perspectiva de trabajo muy diferente al
tradicional, abren las aulas al mundo y permiten la comunicación entre las
personas eliminando las barreras del espacio y del tiempo, de identidad y
estatus.
Internet es una potente
herramienta pedagógica como:
•Fuente de información y conocimiento, al
poder acceder a través del mismo a documentación bibliográfica, prensa,
recursos gráficos y sonoros, simuladores, e incluso poder realizar visitas
virtuales a distintos lugares.
•Medio de comunicación y expresión, mediante
el correo electrónico, foros y chats, blogs, videoconferencia, creación de
páginas web…
•Herramienta didáctica de aprendizaje, al ser
una importante fuente de recursos educativos, que permite al profesor la
utilización de estos materiales y la creación de los mismos con programas
apropiados para la aplicación en el aula de forma colectiva o individualizada
(tratamiento de la diversidad), así como la creación de páginas web entre
profesores y alumnos para compartir materiales y exponer experiencias, las
tutorías telemáticas…
•Dispositivo que facilita el trabajo en equipo
y cooperativo, superando las barreras físicas y temporales, y permite abrir el
aula y la escuela al exterior, así como la creación de redes para el desarrollo
de proyectos conjuntos.
•Instrumento de gestión y administración del
centro educativo para los horarios, los expedientes de alumnos y profesores,
las tutorías, la gestión de la biblioteca, la gestión económica, las
comunicaciones a las familias.
Estamos ya en la segunda era digital y noto que la escuela sigue al márgen, como si no asimilara que las tic, aparte de transitarlas, debe usarlas, incluirlas, hallar modos de aplicar su uso permanente, pero es un equilibrio de poner en función a todos los actores y materiales para un adecuado y real aprendizaje, si no hay compromiso entre las políticas educativas , la escuela y la comunidad la brecha se hará cada vez mayor a la era digital con la escuela.
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